
La Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires (FABA), lanzó una advertencia contra las grandes empresas alimenticias, a las que acusan de aplicar subas de hasta 9% luego del reciente incremento del dólar. Según su presidente, Fernando Savore, estas remarcaciones responden a prácticas especulativas y no a un aumento real en los costos de producción.
23 de septiembre de 2025
BUENOS AIRES – “Ya vivimos esta historia: cuando sube el dólar, suben los precios; cuando baja, nadie retrocede”, criticó Savore, quien también ocupa la vicepresidencia de la Confederación General Almacenera Nacional. El dirigente informó que más de 60.000 comercios de todo el país se comprometieron a no comprar productos a las empresas que apliquen aumentos injustificados.
El referente de los almaceneros mencionó particularmente a una “empresa cordobesa de cinco letras”, que trasladó el 9% de incremento a toda su línea, desde fideos y galletitas hasta mermeladas y enlatados. Otras compañías avanzaron con subas de entre 5% y 6%, aunque reconoció que hay firmas importantes que aún no remarcaron.
PYMES ganan lugar en las góndolas
Savore, autodefinido como “militante de las PYMES”, resaltó que estas empresas se están consolidando como una alternativa clave frente a las primeras marcas. Como ejemplo, señaló que un pan lactal líder cuesta $6.500, mientras que un producto similar de una PYME se ofrece a $2.500. “Una diferencia de $4.000 es más que significativa”, subrayó.
Cambio de hábito
El cambio en los hábitos de consumo también se refleja en las elecciones de los clientes. “El argentino siempre fue muy marquista, pero hoy doña Rosa viene y se lleva el puré de tomate a $800, sin importar la marca”, explicó el dirigente.
Presión sobre las familias
Más allá de los alimentos, Savore advirtió sobre el impacto de otros gastos cotidianos: transporte, energía, internet y gas. “El costo operativo de una familia en Argentina es altísimo por la carga impositiva. Eso está modificando el comportamiento del consumidor, que hoy decide con más cuidado qué comprar”, analizó.
La estrategia de resistencia
Desde la Federación sostienen que la clave para enfrentar las remarcaciones está en el propio mercado: “En definitiva, el que regula es el consumidor. El que dice sí o no es quien compra”. Bajo esa premisa, los almaceneros planean reforzar su alianza con las PYMES y resistir los aumentos de las grandes alimenticias, priorizando la accesibilidad de los productos básicos. (InfoGEI)Jd
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