Se había organizado una marcha, encabezada por los familiares de Navila, y algunos sectores de la sociedad chascomunense para las tres de la tarde. Llegaron y de manera pacífica permanecieron en la esquina de Lastra y Belgrano, hasta que un pequeño grupo de personas quisieron ingresar a la comisaría, y al no poder hacerlo, empezaron a tirar piedras y romper la fachada del edificio, arrojando baldosas y todo tipo de proyectiles que derivaron en serios incidentes.
La policía por su parte, debió recurrir a los gases para dispersar a los revoltosos, aunque solo consiguieron alejarlos un poco. Momentos después, pudo observarse cómo desafiaban a la infantería que estaba «formada» en el lugar.
Muchas versiones llegaron a nuestra redacción, en donde se hablaba de que algunos inescrupulosos habían aprovechado la manifestación para sacar algún rédito político, lo que sería una bajeza asquerosa, ya que ni siquiera respetan a una chica de solo 15 años de edad que perdió su vida en manos de un asqueroso femicida. También mencionaron la presencia de algunos dirigentes políticos que acompañaban a algunos activistas y provocadores que serían quienes comenzaron los incidentes.
Lamentablemente, hubo personas que se estaban manifestando pacíficamente y tuvieron que verse envueltos de manera involuntaria en los incidentes, sufriendo los gases, y una situación que los desbordó, como también policías, que sufrieron agresiones y lesiones de distinta gravedad por las piedras y objetos arrojados por los insensatos.
Tal es el caso de un joven policía, que además es pastor evangélico y muy querido por sus compañeros. Recibió un fuerte piedrazo en la cabeza que le provocó una profunda herida.
El saldo de esto: inocentes heridos, gente descompuesta y una familia que además de haber perdido lo más preciado, es lamentablemente utilizada por algunos inescrupulosos que no reparan en nada a la hora de sacar algún rédito político.
Y cómo siempre, el hilo se corta por lo más delgado: la policía. La policía está atada de pies y manos, si no se les ordena actuar. Acá hay que revisar varias cosas que han quedado expuestas y no por primera vez. ¿La justicia está a la altura de los acontecimientos?… ¿se toman las medidas con la celeridad y la urgencia que un caso como este requiere? Suele decirse que las leyes y la justicia no tienen los tiempos que la ciudadanía requiere…¿se hace algo para cambiar o mejorar esto?…El Intendente ¿estuvo a la altura de las circunstancias? ¿debió ponerse al frente de una situación que se hacía cada vez más desesperante y se veía venir? Al fin y al cabo, él mismo dice que es el responsable directo de la Seguridad.
Muchas preguntas, que como sociedad debemos hacernos, evaluar, y reclamar a las autoridades que de una vez por todas hagan algo para que esto no se repita. Que no hagan el circo de sancionar o cambiar policías, o culparlos de la improvisación, falta de idoneidad y sobre todo de coraje de los personajes políticos de turno.