¡ATENCIÓN! NUEVO CUENTO DEL TÍO PARA ESTAFARTE POR WHATSAPP

ESTAFA POR WHATSAPP

Simulan ser amigos o familiares para cometer el delito, poniendo en juego el combo entre hackeo e ingeniería social para poder engañar a la gente.

Los métodos para estafar y sacarle plata a las personas se van renovando y en las últimas horas surgió un nuevo cuento del tío. El mismo permite que los delincuentes se hagan pasar por conocidos de las víctimas y pidan algo en situación de emergencia.

El proceso suele comenzar con un acceso no autorizado, a perfiles de redes sociales, Gmail o algún tipo de información personal. Con esta información, los cibercriminales se hacen pasar por amigos o familiares, usando el nombre de pila, un apodo o seudónimo con el que los tenemos guardados en la agenda.

La última modalidad conocida es: “Cambiame dólares, es urgente”. Esa es la frase con la forma de delito detectada por los especialistas en ciberseguridad de BTR Consulting.

“¡¡URGENTE!! NECESITO CAMBIAR DÓLARES, POR FAVOR, TUVIMOS UN ACCIDENTE, ESTAMOS DESESPERADOS, SOLO TENGO DOLARES, ESTAMOS EN LA RUTA, PERDI MI CARTERA, TENGO 1.000 DÓLARES QUE LLEVABA EN EL BOLSILLO DEL PANTALÓN, ACABO DE COMPRAR UNA TARJETA PREPAGA Y TE ESCRIBO A TRAVÉS DE UN TELÉFONO QUE ME PRESTARON, ME PODÉS CAMBIAR LOS MIL DÓLARES, TRANSFERIRSE A LA CUENTA xxxx-xxxxxx QUE ACA UNA SEÑORA ME LA SACA POR CAJERO Y ME LA DA, YO EL LUNES TE ALCANZO LOS DÓLARES”.

Los especialistas detallaron que el engaño puede incluir una foto del WhatsApp original de la persona que dice escribirnos o de algunas de sus redes sociales. Los delincuentes las auditan los días previos para armar un “guión”, con datos para generar empatía y confianza. Y nunca quieren que la víctima los llame al celular desde el que están escribiendo.

Normalmente estos delitos se llevan a cabo en horas de la noche o madrugada, en cercanías de los fines de semana, fines de semana largos o vacaciones, buscando que el usuario al que se le suplantó la identidad -y supuestamente envía los pedidos de ayuda- no se notifique de la situación o que, si los contactados por los delincuentes deciden corroborar hablando al teléfono original del remitente, la probabilidad de que conteste es mínima si ocurre un sábado a las 3 AM.

Otro detalle clave es la urgencia, para convencer a las víctimas de actuar ¡YA!, sin tiempo a analizar o pensar la situación. Los estafadores dicen estar apurados y son muy buenos consiguiendo que sus víctimas se pongan nerviosas, metiendo presión para que actúen con rapidez y paguen lo antes posible. Por supuesto, hacer esto con una sola persona podría no resultar muy efectivo, pero si lo hacen con cientos o miles, por estadística, algunas van a caer.