Con la cuarentena obligatoria que se decretó por el avance del Covid, muchas personas se animaron a la compra online de distíntos productos, como es el caso de Camila. La joven de 23 años pagó un par de zapatillas que vio en una página de Instagram de Tandil llamada «Infanta Sofía» para que le llegarán al cabo de diez días. Sin embargo el producto nunca llegó.
Tras reclamar al sitio en reiteradas oportunidades y sin obtener respuesta alguna se contactó con otras chicas que dejaron su queja en la red social de la marca, ya que al igual que ella también habían sido estafadas.
En un grupo de WhatsApp más de 250 jóvenes se unieron para obtener información de esta red de estafadores y descubrieron un dato que lo sorprendió: un joven de 15 años es quién maneja la página y la marca no es de Tandil como indica la web sino de Ayacucho.
«Una de las integrantes del grupo, tenía vínculos laborales con «mercado pago» y nos pasó el dato de cuanto fue lo que nos estafó. Llegó a sacar 250.000 pesos, y en el banco lo recibían como un rey, ya que retiraba la plata sin requerimientos. Estaba en complicidad con el padrastro y la madre. También estafó a los abuelos, porque les robó las tarjetas».
Detalló indignada: La cuenta que recibía la plata mediante la transferencia de los clientes, figuraba a nombre de Carlos Ariel Etchepare, el padrastro del menor de edad.
«Lo buscamos en redes, y en los comentarios de las fotos lo escrachaban». «Tras la repercusión, di una nota con un medio de Ayacucho y se contactó conmigo Luciano Gerasi, persona que me figuraba cuando hice la compra en mercadopago, que estuvo preso más de dos años por una asociación ilícita, ya que se lo acusa de liberar zonas para la venta de estupefacientes».
«Hablamos por teléfono y me dijo que averiguó que existe una cuenta a su nombre y otra a nombre de su mamá, y que ellos no tienen nada que ver. Su sobrino, Martiniano les robó las identidades para recibir el dinero»
En la fiscalía de Dolores están agrupadas las denuncias en tres causas penales, con ellas se hizo un allanamiento y se lleva a cabo una investigación, pero al parecer, estas personas ya se habrían gastado parte de la plata.
«También me contactó la pareja del padre de este menor de edad, porque ellos viven en Tandil, y no sabían lo que estaba pasando. Y esa señora nos aportó datos como que la familia compró una camioneta. Seguimos investigando y llegamos a que el domicilio de la página de venta estaba a nombre de María Lucila Vega, que sería la madre del menor de edad, cómplice del tema. Y Etchepare, su pareja quien recibía los depósitos de la estafa», puntualizó.
Romina Peralta, otra de las chicas estafadas dijo: «Vi por Instagram una publicidad de esta página que tenían todo al 50% y justo se venía el Día del Niño. Me dio seguridad, porque hasta tenían página web y decía que si pagabas por transferencia, te hacían un 10% más. Súper tentador. Compré con la modalidad transferencia y me mandaron el link por mail»