La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) recortó este jueves la estimación de producción de maíz de la campaña 2021/22 en 6 millones de toneladas, hasta los 51 millones, debido a las altas temperaturas y la falta de agua durante el período crítico del cultivo. De concretarse esta última proyección, la cosecha del actual ciclo se ubicará 1,5 millones de toneladas por debajo de lo obtenido en la campaña anterior y desestima las posibilidades de alcanzar un récord productivo.
Con 7,3 millones de hectáreas implantadas, las labores de siembra culminaron durante la semana a nivel nacional. Pero más allá de que la superficie que ocupa el cultivo es 500.000 hectáreas mayor a lo implantado en el ciclo 2020/21, los efectos de las altas temperaturas de la primera quincena de enero en conjunto con la falta de lluvias, afectó a los planteos tempranos del cereal, que para esa fecha atravesaban momentos críticos para definir su rinde.
A pesar de las lluvias que acontecieron de manera heterogénea durante febrero, el 24 % de los lotes de maíz con destino grano comercial mantiene una condición hídrica Regular/Sequía, mientras que el 85% de los lotes de maíz tardío y de segunda ocupación presenta una condición del cultivo Buena/Normal.
Respecto a la soja, a la fecha el 32,3% del área implantada se encuentra atravesando estadios críticos de inicio de diferenciación de vainas, mientras un 83% del área reporta una condición de cultivo Normal a Excelente.
Sin embargo, el 34% del área implantada de soja reportó una condición hídrica Regular/Sequia siendo el NEA, centro-norte de Córdoba y Santa Fe, el Núcleo Norte y el sudeste de Buenos Aires «las regiones más afectadas, como consecuencia de lluvias acumuladas por debajo a lo esperado y de distribución heterogénea», marcó la BCBA.
Por último, ya se cosechó el 22,5% del área sembrada con girasol, con un rinde promedio nacional de 20,9 quintales por hectárea, por lo que la entidad mantuvo la proyección de producción en 3,5 millones de toneladas. (InfoGEI)Jd