Tal como lo habíamos anticipado en LRD, durante la sesión de hoy en el Honorable Concejo Deliberante se tratará entre otros temas el pedido de interpelación al intendente municipal Javier Gastón.
El pedido, será realizado por acuerdo entre los bloques de UCR-CAMBIEMOS y FPV-PJ, habiéndose originado ante la negativa de la secretaria de salud, doctora Marcela Arias, a presentarse a dialogar con los ediles ante una requisitoria de los mismos en relación a las graves situaciones denunciadas por los profesionales de la salud encuadrados en la CICOP.
En un primer momento, los ediles habían invitado para conversar y aclarar estos temas a la mencionada secretaria, responsable del área, pero ésta se negó a asistir, argumentando “compromisos contraídos con antelación”, pero sin especificar cuáles eran, además de presentar una nota de claro tinte político justificando su ausencia por tomar el tema como maniobras electoralistas.
Precisamente esa nota, que simplemente debió haber sido en tal caso una justificación de la no concurrencia de Arias al recinto del Concejo, fue un cúmulo de justificaciones políticas, menospreciando de esa manera los reclamos y denuncias de los profesionales de la salud, como así también la invitación al diálogo de los partidos opositores.
Ciertamente, creemos que hubiera sido fundamental que la secretaria se hubiese presentado a la cita, ya que de esa manera podría haber dado su versión de los hechos, o por lo menos comentar lo que se está haciendo en relación a lo denunciado. Por eso, ahora con este pedido, que es la herramienta que les quedaba a los ediles para que esto no quede en el olvido, seguramente el intendente enviará a Arias, o como desde el gobierno habían pedido, a Pérez del Cerro a brindar las explicaciones que hasta el momento no tienen, o no han querido dar.
Y si en tal caso, no hay problema alguno, y las denuncias han sido falsas, y todo esto es una especulación política, como lo afirma el ejecutivo, la charla o interpelación en cuestión servirá para dejar las cosas en claro y poner blanco sobre negro.
De tener razón, no tendrían por qué preocuparse tanto.