CHASCOMÚS: PROHIBEN DESDE EL PRÓXIMO AÑO EL USO DE PIROTECNIA

Desde la página oficial del Municipio de Chascomús, se publicita la promulgación por parte del intendente municipal Javier Gastón, de la ordenanza por la cual desde el año próximo se prohíbe el uso de pirotecnia en el distrito y las opiniones han comenzado a circular tanto a favor, como en contra de la misma.

En honor a la verdad, la ordenanza surge del sector opositor, más específicamente del bloque de “Cambiemos”, aunque desde el facebok municipal, la publican tratando de “hacer ver” como que es una iniciativa propia, ya que nunca aclaran la verdad, aun cuando algunos lo felicitan, nadie dice que no es idea del intendente.

La ordenanza, fue votada por todos los concejales de forma unánime, demostrando que es más fácil acompañar iniciativas “políticamente correctas”, que debatir y tener en cuenta otras opiniones, como por ejemplo la de muchos comerciantes que en época de fiestas pueden hacer una pequeña diferencia que, por supuesto les sirve, y mucho.

Comienzan a alzarse voces disidentes fundamentalmente con el absolutismo de la medida, que no fue debatida por la sociedad en su conjunto, y que por ejemplo no diferencia la pirotecnia de estruendo, de la pirotecnia “visual” entre otras cuestiones a tener en cuenta para prohibir una larga tradición en la Argentina.

Aquí transcribimos una interesante reflexión de Miguel Ortiz, periodista, docente y poeta, nativo de la localidad cordobesa de Villa Dolores.

“Sigo en contra de las prohibiciones totales, donde el “gran hermano” decide por todos, porque somos tontos y no sabemos tirar una cañita sin quemarnos ni quemar”

“Quizá si no me la hubiesen prohibido a la cañita voladora no tenía tantas ganas de tirar una…. es la primera Navidad de mi vida que no tiro (ni le hago tirar a Camilo) una cañita voladora (que para mí es sinónimo de alegría). Y nunca quemé a nadie ni provoqué incendios. Es como perder lo poco que quedaba de infancia (cuando era chico ansiaba que llegara diciembre para que me compraran unas pocas cañitas…). Puedo acordar muchísimo con los motivos de la prohibición, pero también puedo discutirlos durante horas. Quizá debió prohibirse sólo la pirotecnia de estruendo, no la de esas luces que -algunos viejos quizá nostalgiosos y retrógrados- llevamos en el corazón desde hace años…. Está bien: ahora somos una sociedad moderna, somos más humanos cuando cuidamos a ALGUNOS animales; salimos bien en la foto (en estos tiempos de poses). Pero también hagamos leyes contra la corrupción, el amiguismo, el clientelismo, el nepotismo, la falta de respeto a la naturaleza, la boludez y otros tantos daños que campean todo el año y en todos lados… Y las hagamos respetar…
Lo de defender la pirotecnia “visual” es sólo un texto de despedida a una costumbre que formó parte de mi vida…. Hay algunos que no leen la parte que dice “puedo acordar muchísimo con los motivos de la prohibición…” Pero también digo que hubiese sido bueno un debate y que sigo en contra de las prohibiciones totales, donde el “gran hermano” decide por todos, porque somos tontos y no sabemos tirar una cañita sin quemarnos ni quemar…. Creo que esa uniformidad nos lleva a la automatización, a la estupidez y a la solemnidad”

No solo compartimos esta visión del tema, sino que además se nos ocurre pensar que no siempre la prohibición es el camino, por lo que la medida promulgada por el intendente de Chascomús, y sancionada por los legisladores, nos suena a  .

En Coronel Pringles, por ejemplo, el Concejo Deliberante sancionó la prohibición en todo el partido la comercialización, tenencia, manipulación, depósito, circulación y transporte de determinados artículos de pirotecnia: el mortero estruendo (u otro con similares características sonoras) y globo aerostático (u otro que revista peligrosidad como probable causal de incendios).

Los elementos pirotécnicos que quedaron prohibidos para su comercialización se determinaron en la comisión de asuntos legales luego de investigarse el marco legal y consultar no solo a las personas propiciantes del proyecto sino también a los comerciantes locales que se verán afectados por la normativa.

Evidentemente una postura mucho más abierta y que tuvo en cuenta las distintas opiniones.

También es más coherente lo sancionado en General Belgrano, en donde se hace campaña para que la gente no utilice pirotecnia, pero sin prohibirla, sino sugiriendo:

  1. No comprar pirotecnia
  2. Visibilizar los daños por quemaduras que pueda ocasionar su uso
  3. Visibilizar los daños auditivos y oculares que pueda ocasionar su uso
  4. Visibilizar los casos de personas más afectadas (niños con autismo y/o TGD, personas con ligirofobia)
  5. Visibilizar el daño que produce en las mascotas
  6. Incentivar el uso de pirotecnia fría (fuegos de artificio sin ruido)
  7. Teléfonos de emergencia

 

Los municipios que ya prohibieron o están en camino son: Lezama, San Vicente, Florencio Varela, Olavarría, Chacabuco, Patagones, Chivilcoy, Bahía Blanca, Exaltación de la Cruz, Rivadavia, Coronel Dorrego, Bragado, Berisso y Pergamino. Ahora se suma Chascomús.

En diálogo con QM NOTICIAS, Alejandro Paolini, vocero de Cienfuegos, expresó que “hay algunas ordenanzas que nosotros hemos hecho de forma consensuados con los municipios. Nosotros retiramos de la venta los 14 productos de más alto impacto auditivo”.

Entonces explicó que “ninguna legislación provincial o municipal puede ir en contra de una nacional. La ley 20.419 es la que rige a la industria y se regula su actividad. Con lo cual cada una de las ordenanzas que prohíbe en su totalidad el uso es inconstitucional, como por ejemplo la que quieren aprobar en San Vicente”.

En cuanto a cómo impactaría una prohibición total en la empresa a la que representa, contó que “hemos planteado esto en la Cámara de Diputados y los trabajadores pidieron audiencias en los sindicatos”.

“La industria genera unos cinco mil puestos de trabajo directos y unos 60 indirectos. Esos puestos de trabajo quedan pendientes de una suspensión de una actividad que es legal”, aseguró.

TEXTO DE LA ORDENANZA. SOLO EXCLUYE AL MUNICIPIO, SEGURIDAD Y BOMBEROS.

En Chascomús, por ejemplo el señor Miguel Ángel Martínez estudió y se capacitó para trabajar con pirotecnia. Solamente vende material aprobado por la justicia, y paga todos los impuestos.  ¿Quién ahora se hará cargo del perjuicio que tendrá este vecino?

Nos preguntamos seriamente si el intendente y los concejales nunca esperaron con ansiedad las fiestas para poder «tirar unos cohetes con sus padres». Si nunca compartieron con sus hijos ese momento en el que por lo general la familia a las doce en punto sale al exterior a ver el cielo lleno de fuegos artificiales. Prohibieron cinco minutos por año de alegría, en lugar de ocuparse de hacer prevención, pero bien…prohibir es más fácil y cuesta menos trabajo.

Por último, nos gustaría muchísimo que quienes son responsables de sancionar las normas que regirán nuestra sociedad, al igual que el ejecutivo que las promulga, ocupen también su tiempo en otras cuestiones que son muchísimo más cotidianas, comunes y recurrentes que las fiestas de Navidad y Año Nuevo.

Ocúpense de la usurpación de terrenos y el aprovechamiento y “tráfico” de unos pocos de los terrenos fiscales en el partido (de eso nadie habla). Ocúpense de la proliferación de las drogas. No sean hipócritas, y ocúpense realmente del problema de la tenencia irresponsable de animales y la innumerable cantidad de perros sueltos en Chascomús, que ya han ocasionado accidentes, algunos de gravedad. Ocúpense de la pesca furtiva, y, además ejerzan un estricto control de la pesca deportiva. Y la lista podría continuar “in eternum”, pero para no aburrir, la terminamos aquí.

Ojalá sean tan eficientes para otras cosas que son de mayor importancia.