Se trata de Guido Lorenzino, quien citó a las partes a una mesa de diálogo, a efectos de tratar de destrabar el conflicto que mantienen hace rato, y ha afectado a muchas criaturas que vieron pospuesto el inicio de sus clases.
Lorenzino les envió una carta a la gobernadora de la provincia, María Eugenia Vidal, y al representante de SUTEBA, Roberto Baradel, en donde ofreció a la Defensoría del Pueblo “como ámbito que permita el diálogo entre el Gobierno y los gremios docentes para acercar posiciones y encontrar soluciones satisfactorias”.
El ofrecimiento se fundamentó en la defensa de “los derechos de los alumnos a recibir una educación pública de calidad y los derechos de los trabajadores de la educación de tener un salario digno y condiciones laborales adecuadas”.
“Propongo que la Defensoría del Pueblo sea el ámbito que propicie el entendimiento que necesitan los bonaerenses en estos momentos”, manifestó en la carta que le envió a Vidal y a Baradel.