Una investigación de varios meses permitió desbaratar a la banda, secuestrar marihuana que tenían preparada para fraccionar y vender, y detener a 11 personas. El cabecilla manejaba todo desde una celda de la Unidad Penal 30 de General Alvear. La mujer policía, de 29 años, fue beneficiada con arresto domiciliario porque cursa un «embarazo de riesgo».
Meses de investigación y largas horas de escuchas telefónicas permitieron a la Policía Federal desarticular una banda que comercializaba drogas en la ciudad de Azul y la zona. Fueron diez allanamientos en los que detuvieron a 11 personas y secuestraron más de un kilo de marihuana y elementos de para el narcomenudeo.
Entre los 11 detenidos había tres hombres y ocho mujeres. Uno de ellos era un preso que cumplía condenda en la Unidad Penal 30 de General Alvear, identificado como Carlos José María Cano, de 50 años, oriundo de Azul, considerado el líder de la banda.
Las escuchas telefónicas permitieron establecer que Cano coordinaba la red desde la propia celda, con celulares que tenía de manera clandestina y que fueron secuestrados durante un allanamiento en la propia unidad penitenciaria donde estaba alojado. Ante el fiscal del caso, Lucas Moyano, el reo hizo uso de su derecho a no declarar.
Cano también fue acusado de perpetrar estafas telefónicas desde la cárcel: se hacía pasar por un representante de una mutual policial y con el dinero que obtenía de los engaños compraba la droga que luego el resto de la banda comercializaba.
Además del preso cabecilla de la banda, fue detenida una mujer que se desempeñaba como agente de la Policía Bonaerense en Azul. Identificada como María Florencia Belén Blanco, de 29 años, fue detenida tras un allanamiento en su casa de la calle República de Italia, en esa ciudad de la séptima sección electoral, vinculada directamente como parte integrante de la banda desbaratada.
La mujer policía cursa un embarazo que fue considerado «de riesgo», por lo que sue abogado defensor logró que le Juzgado de Garantías interviniente le otorgue el beneficio de arresto domiciliario mientras se sustancia el proceso en su contra.
Entre los once detenidos hay, además de Cano y la policía Blanco, un empleada de la Municipalidad de Azul, de 46 años, identificada como María Crisil Carabajal. Daniel Calderón (30) Antonela Tosolini (24), María Hortensia Ponce Ledesma (36), Araceli Otegui (24), Karen Martínez (23), José Manuel Ciuro (26), Micaela Aguilar (21) y Ludmila Oliver (23) completan la banda desbaratada y están todos detenidos.
fuente l1N