Tenía 17 años y nada se sabía de ella desde el 27 de noviembre pasado, cuando salió de la casa de su mamá en Lomas de Zamora a buscar unas zapatillas que había comprado. Su primo fue detenido y hay dos prófugos. Los detalles del horror.
01 de diciembre de 2024
LOMAS DE ZAMORA – “Hace años que no se veía algo tan macabro”, confesó uno de los investigadores del feminidio de Candela Magalí Milagros Azoya , una joven que había desaparecido hace unos días.
El 27 de Noviembre pasado, la adolescente, que vivía en Mar del Plata y estaba visitando a su mamá en Lomas de Zamora, salió de la casa familiar de la localidad de Villa Centenario rumbo a la plaza de Santa Marta a buscar unas zapatillas usadas que se había comprado por redes sociales.
Restos calcinados: el descubrimiento
En la madrugada del sábado, vecinos alertaron a las autoridades sobre restos humanos calcinados entre la basura cerca de las vías del ferrocarril Roca, en el tramo que conecta Temperley y Haedo. La escena era dantesca: un pie semi calcinado, un tobillo y una media fueron encontrados entre los desechos. Más tarde, la madre de Candela reconocería la media como perteneciente a su hija.
El rastrillaje posterior, liderado por la fiscal Carla Furingo , permitió encontrar otros restos a 300 metros del lugar inicial, incluyendo la cabeza y huesos calcinados. Sin embargo, hasta el domingo, no se había localizado el torso de la víctima. “Todo estaba tan quemado que es muy difícil que se pueda extraer ADN”, indicaron fuentes policiales, complicando aún más el proceso de identificación científica.
Un primo, principal sospechoso
Las cámaras de seguridad fueron determinantes para dar con Carlos Azoya , primo hermano de la víctima, quien fue detenido como el principal sospechoso. Según la investigación, Candela habría acudido por sus propios medios a un aguantadero en la zona, conocida por la comercialización de paco, acompañada por su primo y otros dos hombres que permanecen prófugos.
El detenido será indagado este lunes por el fiscal Furingo, mientras continúa la búsqueda de los hermanos implicados. La causa está caratulada como homicidio triplemente agravado : por el vínculo, el contexto de violencia de género y el ensañamiento.
Un caso que exige justicia
El feminidio de Candela pone de manifiesto la brutalidad de los crímenes de género en Argentina y deja una huella de dolor en la familia y en la comunidad de Lomas de Zamora. “La violencia ejercida fue extrema, y el ensañamiento, evidente”, detallaron fuentes judiciales. El caso también exponen las dinámicas de violencia vinculadas al narcotráfico en zonas vulnerables.
El país entero clama por justicia para Candela, y las autoridades trabajan contra reloj para dar con los responsables y esclarecer todos los detalles de este crimen que ha conmocionado a la sociedad.
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