Entre quienes cuestionaron la decisión del gobierno nacional, anunciada el día de ayer por el presidente Mauricio Macri en cadena nacional, donde dijo que se recurrirá nuevamente al FMI (Fondo Monetario Internacional), se encuentra el secretario adjunto de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), Néstor Segovia, que utilizó su red social para descargar la indignación que le produjo el anuncio. Con una catarata de agravios para el oficialismo en general, y el presidente en particular, se podría decir que el gremialista no se quedó con las ganas de decirles lo que pensaba.
Esta medida se tomará para pedirles una nueva línea de crédito que les permita subsanar el daño de la corrida financiera de la semana pasada, despertó un océano de críticas; y muy pocas adhesiones, como la de su aliada política, la diputada Elisa Carrió.
“Cómo a uno no le va a subir la presión si estos hijos de p*** están hipotecando nuevamente a nuestros hijos… Que la historia los juzgue por chorro guante blanco… Macri cagón no te animas cobrar impuestos a los que más tienen las mineras los empresarios. Te cagas en el pueblo”, sentenció el metrodelegado, desde su cuenta oficial de Twitter.
En tanto, la tensión entre el gremialista y el Gobierno no se originó la semana pasada, cuando el dólar se disparó por arriba de los 23 pesos y forzó al ministro Nicolás Dujovne a viajar anoche de emergencia a Estados Unidos para pedir plata prestada. Desde hace varias semanas que los trabajadores del subte rechazan el acuerdo firmado entre la Unión Tranviaria Automotor (UTA) y el gobierno de la Ciudad.
Con el objetivo de lograr un mejor arreglo paritario, los empleados realizan medidas de fuerza diarias en distintas líneas de subte, que van desde la interrupción total del servicio, hasta el levantamiento de molinetes. «Nos meten la mano en el bolsillo a los trabajadores, haciéndonos perder entre un 10 y un 15% del nivel adquisitivo del salario en un año”, denunciaron desde el sindicato.