LA SENTIDA NOTA DEL DOCTOR JORGE ORTALE, LUEGO DE SALVAR A UNA NENA DE 4 AÑOS,QUE HABÍA SIDO VISTA POR SEIS MÉDICOS QUE NO PUDIERON ADVERTIR EL PROBLEMA QUE AFECTABA A LA CRIATURA

El doctor Jorge Ortale, pudo advertir lo que otros seis profesionales no pudieron. Isabella de 4 añitos de edad, había tragado una «pila botón». Gracias a esto, la niña fue trasladada a La Plata donde mediante una endoscopía le quitaron el objeto. Luego que la mamá de Isabella publicó el hecho en la red social Facebook, el doctor Ortale hizo lo propio, en la misma red social, aclarando al otro día el porqué.

«Mi intención en la publicación de ayer fue poner en conocimiento de la población la incomprensible situación de no permitirse a médicos no pertenecientes a la Institución, pero con matricula vigente, a visitar a sus pacientes sin intervenir en decisiones de carácter médico a menos que se acuerden con el equipo asistencial del hospital», escribió Ortale.

LA PUBLICACIÓN DEL DR. JORGE ORTALE

«A raíz de la publicación de una paciente quejándose por la atención recibida en el Hospital, sobre la que no voy a opinar por no tener los elementos suficientes, aprovecho la oportunidad para contar algunas experiencias personales que me acontecieron en en esa Institución.
Aclaro que fuí médico de planta del Hospital(pediatra)durante 30 años-desde 1972 hasta 2002-de manera ininterrumpida hasta jubilarme.
Mi paso por el hospital me brindó muchas satisfacciones personales- y también de las otras-pero confieso que nunca me sentí cómodo en él por la falta de estímulos que me permitieran desarrollar mis inquietudes profesionales, siempre relacionadas con la actividad en el ámbito público.
Soy hijo del Hospital Público donde recibí mi formación mediante la Residencia en el Hospital de Niños de La Plata y vine a Chascomús a trabajar full time en el Hospital, proyecto que se truncó a poco de comenzado por cuestiones políticas locales ajenas a mi, sobre las que no voy a abundar.
Pronto a cumplir 54 años de médico y 51 de residencia en Chascomús, ejerciendo aún la actividad privada, no se me ha permitido el ingreso al Hospital a requerimiento de familiares de pacientes internados que querían conocer mi opinión sobre su estado de salud, teniendo que «colarme» o esperar el horario de visitas para hacerlo.
Hace poco, un destacado colega que vive en Chascomús pero desarrolla su actividad en CABA, cuyo hijo tuvo un accidente de poca importancia, pidió ingresar para verlo, cosa que le fue negada por un médico de guardia que conocía su condición de profesional, quien ante su insistencia lo amenazó con obligarlo a retirarse con la seguridad.
Hago público estos hechos por este medio ya que lo he hecho informalmente ante muchas personas relacionadas con el Municipio (nunca oficialmente porque me resulta indigno pedir que me dejen entrar al Hospital como si fuera un indeseable), sin ningún eco.
Les mando un saludo a todos.»