La señora María Zoya de Betanzo, hizo pública a través de Facebook una denuncia que además de narrar un hecho más que lamentable, donde no solo debe lidiar con la situación de haber perdido una hija, sino que además, sufre por tercera vez la profanación y el robo de algunos elementos en el lugar de descanso de los restos de la chica. Aquí reproducimos el diálogo con María, y repudiamos el inaceptable hecho, esperando que de una vez por todas las autoridades no miren hacia otro lado.
La Revista Digital, tuvo una entrevista con María, donde nos contó la triste historia de la pérdida de su hija.
Su familia vivía en el campo, y en el año 2002, cuando la joven tenía 19 años, tuvo un aneurisma cardiovascular, que sucedió cuando se estaba por bañar para salir con su novio. Alcanzaron a llevarla hasta el Hospital Municipal, pero ya «no había nada para hacer».
Nos comentó que es la tercera vez que sufre robos en la bóveda donde se llevaron todo lo que había de bronce, candelabros y floreros.
Estaba muy molesta, porque ellos son asiduos visitantes del cementerio, sobre todo, nunca faltan en fechas especiales como aniversarios familiares o la fecha que sería el cumpleaños de su niña, María Gabriela Betanzo Zoya.
María contó que «El día 9 de mayo, es el cumpleaños de mi hija, y mi esposo lo llamó al Chapita, porque somos amigos del padre, y lo conocemos de chico. Entonces el «Chapa» le dice a mi marido que hable con Muscarello y le pasa el número de teléfono. Mi marido le pidió de todas las maneras posibles a Muscarello si lo dejaba entrar, aunque sea a él solo a dejarle un ramito de flores, pero Muscarello le dice que no, por la pandemia y fue inflexible. Para nosotros, esas fechas son muy puntuales: el cumpleaños, ahora en octubre el aniversario de su fallecimiento… Bueno, le dijo que no»
Continuó su relato, diciendo que «Fuimos igual al cementerio, y justo había un entierro. Dije bueno, igual nos metemos porque se meten tantos que total… Justo estaban las dos chicas que estaban a cargo del cementerio, y creo que le dimos tanta pena ese 9 de mayo, que una de ellas lo acompañó a mi esposo para que pudiera dejar un ramo de flores en la tumba de mi hija. Luego de esto, el día 10 de mayo a las 8 de la mañana, el señor Muscarello habilita el ingreso a la gente al cementerio hasta las 11 de la mañana. ¿cómo debo tomar eso?… Y él pretende que yo no esté enojada.
Agregó que el estado del cementerio es «deprimente», su abandono y la suciedad. Y que le envió sendas fotografías a Gastón y a Muscarello que lo demostraban, acompañándolas de un audio donde narra la indignante situación. «El 9 era el cumpleaños de mi hija, y no nos permitió ir a dejarle un ramo de flores, y el día 10, unas horas después usted autorizó el ingreso a todo el mundo hasta las once», sentenció.
También mencionó que en el cementerio entra quien quiere, y que es moneda corriente. De hecho, nos dijo que en los alrededores de la bóveda de su familia, había también bóvedas abiertas, cajones abiertos, y que se sabe que ahí se habrían realizado algún tipo de rituales, con velas, animales muertos y demás, que ella denunció hace aproximadamente cinco años. Aseguró que le dijeron que «hay cámaras», pero se apagan a la noche y que no hay sereno.
Sabemos que esto no es de hoy, pero nos preguntamos ¿hasta cuando vamos a tolerar que cualquiera ingrese al cementerio y profane el lugar de descanso de nuestros familiares y amigos? ¿Nada puede hacerse al respecto? SI hay cámaras, ¿porqué motivo no son monitoreadas por el mismo personal que monitorea las calles de la ciudad? ¿Será como dice María, que es porque «los muertos no votan?…
María cuestionó la falta de compromiso del Intendente a quien conoce desde chico, y se lavó las manos, derivando el tema en Muscarello, pero también aseguró que «Aunque Muscarello trabaje ad-honorem en el cementerio, deberían poner a alguien que pueda dedicar todo el día ya que hay muchas necesidades. Y no a alguien que como él mismo me dijo, se ocupa cuando le queda tiempo luego de su trabajo en Ansés, y evidentemente no se pueden hacer las dos cosas a la vez».
Culminó muy indignada, porque aseguró que le dijeron que el sector donde ella tiene la bóveda pasa a ser «patrimonio histórico del cementerio» y van a hacerse recorridas, y que «por ese motivo tienen orden de no limpiar en el sector», algo que realmente sería una de las excusas más increíbles que se hayan escuchado.
María destacó en todo momento la atención y consideración que tuvo con ella la chica que los atendió. «se llama Laura Palazzo y nos atendió super bien, ¿pero ella qué solución me puede dar?». se preguntó.
EL VIDEO DE MARÍA ZOYA DE BETANZO