La fiscal de Daniela Bertoletti, a cargo de la causa del asesinato de Navila, aseguró que víctima y victimario se conocían y se veían seguido. «Mantenían trato frecuente, ella cenaba en su casa, iba a bañarse a la casa de él, iba constantemente, él le mandaba un remís y ella iba», contó la funcionaria a C5N.
Además, aclaró que la madre de la víctima, Débora Garay, «es prima lejana de este señor», al que toda la familia conocía y cuyo único vehículo de su propiedad era una moto.
El martes 10 de septiembre pasado, la chica fue en un remís a la casa de «Lito», que está en pareja y salió a pagarle el viaje al chofer. Entre las 18 y las 18.30, el celular de Navila perdió su conexión. Desde allí los dos se fueron a la casaquinta donde Garay solía hacer trabajos de mantenimiento.
Se sospecha que el asesino, la llevó al lugar bajo algún engaño.
En la quinta hay un lugar donde Néstor «Lito» Garay tenía preparado para quedarse a dormir. Allí se produjo el homicidio, de acuerdo a la fiscal, por motivos todavía no esclarecidos. Entre otros objetos, se encontró una maza, y algunos «palos», ambos con manchas de sangre. Al igual que en paredes y piso.
La autopsia determinó que la chica recibió al menos 17 mazazos en la cabeza pero según palabras de la fiscal, «No hay signos de violencia sexual».